Artículo publicado en el Diario de Alcalá el 15 de noviembre de 2012
Y no fumo nada, antes de que alguno intente emular a Juan José Güemes. Para afirmar esto hay un par de datos relevantes que me hacen pensar que pronto las cosas irán mejor, o desde luego no irán peor.
El primer dato es el de las exportaciones de nuestro país, un símbolo inequívoco de que nuestro país está siendo más competitivo (una de las causas de nuestro particular precipicio ya que importábamos mucho más de lo que exportábamos). Ambos aspectos, exportaciones y productividad, van de la mano y es algo esencial para la recuperación. Por poner un ejemplo de la evolución tan positiva, la productividad en España no creció nada entre 2001 y 2007, y desde el 2008 hasta hoy la productividad de las empresas ha crecido un 11%. En cuanto al crecimiento de las exportaciones, las cifras son de dos dígitos desde el 2008 hasta hoy, y según el último informe del BBVA research tiene pinta de seguir por el mismo camino durante el presente año 2012. Esta estupenda noticia es achacable al hecho de que parece que las empresas españolas se han puesto las pilas y han visto que si en España no había mercado podían buscarlo fuera. Ya saben, de estas cosas de las que uno se da cuenta cuando se ve en apuros: algo bueno tienen las crisis.
El otro dato positivo es algo que ha pasado relativamente desapercibido para gran parte de la prensa y que creo que es de vital importancia. Las últimas cifras del paro siguen siendo abultadas, demasiado, (a pesar de que sea un mejor tercer trimestre que el del año pasado), pero hay un aspecto cualitativo que hace ver las cosas desde el optimismo.
Cuando Zapatero, ese genio de la economía creado en dos tardes, empezó a gestionar allá por 2007 la que se le venía encima, (llamémosle pequeña desaceleración, del color que quieran), se planteó que había que hacer una política de gasto público (Plan E, 50.000 millones en total) a la vez que la Administración Pública empezó a contratar gente como si no hubiera mañana, (350.000 más desde 2008 a 2011: la última etapa de Zapatero) aunque no supiéramos muy bien quién iba a pagar toda esa fiesta. Pero no todo es culpa suya, sino de las Comunidades autónomas y las Entidades Locales (en menor medida), que fueron las que realmente contrataron a granel (16% más de “funcionarios” los unos y 10% más los otros en tres años) y que suponen el grueso del gasto de la Administración Pública en España.
Podrían decirme que se trata de otra faceta más de gasto público combinada con el Plan E, pero mi lectura de este dato es: las Comunidades gobernadas por el PSOE vieron que no iban a ganar en las elecciones municipales y autonómicas de mayo de 2011 y decidieron colocar hasta al sobrino del apuntador, para así protegerlos con el principio de inamovilidad propio del funcionariado.
Tras esta estupenda actitud y sentido de Estado mientras las pasábamos canutas para colocar deuda en el mercado y había que empezar a hacer recortes, se produjo el cambio de gobierno en la mayoría de las comunidades autónomas gobernadas por el PSOE, y posteriormente en el gobierno de España. A partir de ese momento, hablan los datos, se produjo una disminución de los trabajadores de la Administración Pública en 230.000 trabajadores. Es decir, la Administración se está apretando el cinturón por primera vez en toda la crisis, después de tantos parados y desahuciados.
Por otra parte, el empleo privado, el que ha estado destruyendo empleo durante toda la crisis, ha perdido la ínfima cifra de 500 puestos puestos de trabajo en los tres trimestres del presente 2012. Por tanto, cuando la administración deje de destruir empleo, y con las expectativas de aumento de la productividad, unido a que el “banco malo” (Sareb) puede dar un buen empujón al mercado inmobiliario, parece que pronto podremos ver brotes, del color que ustedes quieran.
Intenta que no se note tanto tu inclinación política... por favor.
ResponderEliminarJajaja, agradezco tu comentario, pero no tengo por qué ocultarla. En cualquier caso los datos son los datos y estas mis conclusiones. Creo que no son descabelladas.
EliminarEs loable tu preocupación por la política, y desde luego sería una estupenda noticia que tu tesis principal, que estamos en una fase de recuperación económica, sea cierta, si bien no sabemos si esa recuperación va a ser en forma de U, siendo el valle de la U el punto donde estamos ahora, o más bien de L, con el palito horizontal de la L indicando que la recuperación será lenta y dolorosa, como todo parece apuntar. Además, daría muchísima más validez a tu argumentación el que citaras de dónde sacas las cifras, puesto que si no, parece más manipulación y sesgo estadístico, que otras cosas.
ResponderEliminarUn saludo.
Muchas gracias por tu comentario. Las cifras han sido extraídas de la Encuesta de Población Activa y de otros datos del Instituto Nacional de estadística. No tengo ninguna intención de manipular los datos. Esperemos que ya estemos en la U.
ResponderEliminarUn saludo.